Conozco
la ignorancia del amor
en todos los idiomas.
La desventaja
de la desesperación
quebrando cielos que nunca sangran.
Impotente
atado a un arado
pierdo letra y corazón.
Ella,
muerta de goce
caen sus piernas,
toca el horizonte
y ordena que me detenga
justo
donde se derrama el sol
a orillas de su boca en selva.
Tomo agua del ocaso,
sacia la sed
pero no agota mi tomar.
Tierra si no estás muerta
bajo la negra grieta
y te hundes en certezas
Aguanta
fresca entre las matas
el fuego eterno,
verás...
simplemente
insiste si existes.
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