El cuerpo,
para dormir ilumina las esferas,
la boca toma el incendio,
el calor se encama con el frío,
La infidelidad de las razones y las terquedades
alteran la temperatura de la vida,
los amantes sucumben
del color y los sabores, poco queda.
La palabra se endurece
de luz, el ojo recorre
la penumbra, ama sin detalles.
El pecado, se convierte en himno.
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